Hugo Ortega Vázquez (Akbal)

Cazador de historias que existen ocultas y esperan ser descubiertas y escritas. Además de transformarlas en mundos de poesía, cuento y teatro, fundó nuestra editorial.

Hugo Ortega Vázquez nació en 1975 en Ciudad de México, donde residió hasta el 2022, año en que se mudó a Santander, España. Su primer impulso literario fue el entorno en que vivía, pues creció en uno de los lugares más conflictivos del antiguamente llamado Distrito Federal (DF). Siempre se sintió diferente y fuera de sitio, lo que le llevaba a imaginar e inventar canciones en el silencio y soledad de la noche. A sus escasos 10 años, compuso sus primeros versos.

Su adolescencia fue un tanto introvertida y algunos miedos fueron sanando gracias a las letras: cuentos cortos y poesía creada desde la más pura imaginación. Un mundo mágico y sagrado concebido por él, habitable solo por los seres enigmáticos de la mente que ayudaban a soportar la realidad del mundo caótico fuera de su cabeza. Hugo se propuso, desde muy temprana edad, rescatar el lenguaje de la belleza, de lo oculto en todas las cosas existentes, así como enaltecer el alma.

En su juventud, la escritura lo acompañó a las huelgas estudiantiles, asambleas interminables y marchas multitudinarias allá por los años 90. Las experiencias de la rebeldía nutrieron su pensamiento y lo engordaron de coraje hacia un sistema opresor, transformando sus poemas en balas. Ingresó a la Universidad Autónoma de México (UNAM) a estudiar veterinaria, pero siguió en la lucha social, participando en protestas y en una gran huelga de muchos meses.

La naturaleza se volvió fundamental en sus letras: los lugares solitarios, montañas, desiertos, mares. Pero en lo económico y social, tiempos difíciles se le presentaron y tuvo que dejar sus estudios para trabajar en una cocina. Las letras nunca cesaron de crecer, tampoco las ideas de justicia, lo que le llevó a dirigir un movimiento en el que exigía igualdad para todos los trabajadores. Pero éste acabó en traición y, con ello, guardó sus poemas y relatos en un cajón durante algún tiempo.

Años después, en el 2007, comenzó a trabajar en una fábrica de galletas multinacional muy conocida en la cual encabezó otro un movimiento para reclamar un sindicato independiente y que se cumpliera la ley federal de trabajo para los 1.500 trabajadores que laboraban ahí. Esto también acabó mal: “compañeros” que le echaron al ruedo, amenazas de muerte de los abogados de la transnacional, orden de aprensión y boletinado para no poder trabajar en ninguna empresa en México.

Después de todas estas experiencias, Hugo volvió a refugiarse en la escritura. En 2014 y 2015, participó en tres antologías poéticas: Lascivo, Sobrevivientes y Narrativas Arrabaleras, de las editoriales independientes La sangre de las musas y Alevosía Multiforos. También participó en el Festival EROTIKA 5 de poesía en Oaxaca. Comenzó su transitar por recitales y talleres literarios, entre los que destaca el taller de poesía del Faro de Oriente junto con Armando Oviedo y el de la Universidad Obrera de México, cuya revista publicó uno de sus primeros cuentos: Promesa.

Asimismo, ha publicado cuentos y poemas con la revista mexicana Mentidero. Se presentó también a varios certámenes, ganando el tercer lugar en el concurso de poesía Corazón Maltrecho realizado por el colectivo literario Sembrando Letras de la UACM (Universidad Autónoma de la Ciudad de México).

Hugo fue ponente en el Foro Internacional Aciertos y Retos de la Difusión Cultural y Extensión Universitaria, organizado por la UACM en 2016, con Crónica de Tepito, una narración sobre el barrio bravo donde estuvo ganándose la vida como comerciante durante 10 años. En el año 2019, ganó el segundo lugar y un diplomado de literatura impartido por escritores reconocidos del CME, Literaria, Centro Mexicano de Escritores, con este mismo trabajo. El concurso fue organizado por la alcaldía Cuauhtémoc en la Ciudad de México.

En marzo del 2017, Hugo conoció a María Ferreiro Garrido (Arim Atzin), escritora y editora española de I filo SOFÍA. Nunca más se separarán en lo personal ni en lo profesional. En esta editorial, que precede a Noctis Labyrinthus, publicó una obra de teatro: Curado de piñón para aliviar el corazón, sátira para día de muertos. Esta sátira ha sido varias veces representada en la festividad mexicana de Día de Muertos por varias compañías de teatro entre los años 2018 y 2021.

En estos años y gracias a su experiencia de décadas en danza prehispánica, Hugo estuvo escribiendo un performance musical que retrata la historia del barrio de Tepito a través del baile. En esta obra colaboró con Óscar Sarmiento, director de la compañía de danza Raíces Latinas Tepito. Sin embargo, está a la espera de ver la luz por falta de financiación.

En 2021, Hugo fundó la editorial hispano-mexicana Noctis Labyrinthus junto con Arim Atzin. Juntos, han trabajado en varios proyectos teatrales de obras escritas por él mismo: en mayo del 2021, estrenaron el microteatro El Ilusionista, junto con el grupo de danza conchera y prehispánica Xochipilli Mixkoak. En agosto del mismo año, llevaron a escena Campanas de bronce, un cuento adaptado a teatro presentado en el Museo del Juguete Antiguo México.

En 2022, Hugo cruzó por primera vez el charco para irse a vivir a España. En la actualidad, está trabajando en la edición de dos poemarios propios: Poemas para nadie y otros sueños y Antes de cruzar el piélago, así como en una antología de cuentos propios y nuevas obras de teatro. Estos libros serán publicados en Noctis Labyrinthus.

Pueden leerse algunos textos y fragmentos en su página de Facebook y su perfil de Instagram, ambos llamados Las Palabras de Akbal.

Hugo en Noctis Labyrinthus

Hugo en los medios:

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